Shamballa 13D / Mahatma

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Cuando trabajamos con la energía de Mahatma, nos conectamos con nuestro propio sistema energético, y con una  vibración de alta frecuencia, la energía del amor, la energía del Universo.

Se dan todas las condiciones para que el cuerpo físico y cuerpo energético se sincronicen. Te sientes como el ser completo que eres, en calma, y con la certeza de que todo puede ser perfecto!. Porque necesitas que los cambios por vivir, lo cotidiano, se desarrollen de forma fácil y amable. Canalizando la energía del AMOR o Mahatma todo ser recoloca. Equilibrando el flujo de energía entre los hemisferios cerebrales, existe coherencia entre la racionalidad y la emocionalidad,  el Ying y el Yan, tus polaridades femenina y masculina, el Qi y el Shen, El SER . Es una energía compatible  y complementario a cualquier tipo de terapia o tratamiento.

 ¿Cómo?:
 

Durante una sesión de la persona estará tumbada o sentada cómodamente, vestida. El terapeuta colocará las manos en una zona específica para una dolencia o si se trata de una sesión completa, irá colocando las manos desde la cabeza hasta los pies. Las posiciones de las manos se mantendrán unos minutos sobre los chakras o centros energéticos, acompañando la respiración (nunca sobre zonas que vulneren la intimidad de la persona).

 Beneficios:
 

Recuperar la alegría, la confianza, la vitalidad y el amor por tí. Restablecer tu nivel energético óptimo Elevar el nivel vibratorio en tu cuerpo físico, cuerpo mental, cuerpo energético, cuerpo etérico y astral. Recargas pilas, sientes que puedes con todo y estás en paz contigo. Te permites entrar en contacto con tu espiritualidad, si es esa tu necesidad. Esa espiritualidad que tienen que ver con tu conexión con el SER, con tu LUZ interior, con todo y con todos. Por encima de las creencias religiosas o no religiosas, estás en ARMONIA. Dejas de lado la angustia, la pre-ocupaciones y empiezas a tener ganas de hacer cosas, de estar con amigos y conocidos, ganas de hacer excursiones, estar en contacto con la naturaleza, en fin, ganas de VIVIR. Como somos un todo, también notarás como van mejorando los dolores articulares, musculares, estomacales, dolores de cabeza, contracturas, la tristeza, el nerviosismo, la ansiedad…