Shiatsu, tratamiento eficaz y sin complicaciones

« Tratamiento que, aplicando presiones con los dedos pulgares y las palmas de las manos sobre determinados puntos del cuerpo corrige irregularidades, mantiene y mejora la salud, contribuye a aliviar diversas enfermedades (molestias, dolores, estrés, trastornos nerviosos etc) y activa la capacidad de autocuración del organismo »

 (según los diccionarios enciclopédicos de Japón)
 

      El Shiatsu se ha mostrado eficaz en prevención, mantenimiento y mejora de la salud en general, ansiedad, estrés, migrañas, cefaléas, insomnio, durante el embarazo, postparto, trastornos menstruales, menopausia, hipertensión, ciática, lumbalgias, tortícolis, síndrome de túnel carpiano, tensión en los hombros, desórdenes de los sistemas metabólico, endocrino, reproductor, etc
Los Efectos del Shiatsu :

  • Sobre la PIEL: al estimular la circulación sanguínea activa las células de la piel y con ello mejora la flexibilidad de la misma, favoreciendo la eliminación de sustancias tóxicas a través de las glándulas sudoríparas.
  • Sistema Circulatorio: mejora la circulación sanguínea en todo el cuerpo, especialmente en las extremidades cuando éstas no se mueven lo suficiente debido a la vida sedentaria. El tratamiento continuado de Shiatsu ayuda a mantener tonificados e irrigados los músculos y articulaciones.
  • Sistema Musculo – Esquelético: la presión aplicada sobre la musculatura, activa y mejora el tono muscular, el intercambio linfático, circulación sanguínea. Se recupera la flexibilidad, facilitando el movimiento de las articulaciones. Mejora la asimilación del calcio en las articulaciones, previene deformaciones, artritis y dolores articulares.
  • Sistema Digestivo: además de favorecer la absorción de los alimentos (intestino delgado), el efecto relajación/activación sobre el estómago ayuda a mejorar las digestiones y con ello la asimilación de los nutrientes y eliminación de deshechos (estreñimiento).
  • Sistema Nervioso: anima la relajación y facilita las conexiones nerviosas, a través de las presiones se promueve la toma de conciencia del propio organismo (cuerpo/mente).

En cualquier caso, el Shiatsu requiere continuidad, al principio se aplicará con más frecuencia (una vez a la semana) y poco a poco el propio paciente determina su propia necesidad.